martes, 22 de marzo de 2022

Reflexión de última hora

He dejado apartado mi blog en una esquina, como el que abandona un hijo en la puerta de un hospicio.
Esperando que las ideas lo adopten y lo hagan crecer.
Me cuesta; admito que mi cerebro y mis ganas están yermos, como una nuez hueca, seca y podré.
Tampoco pienso, últimamente me llena la pandemia, la fiebre y la guerra.

No hay comentarios:

Publicar un comentario